La política ahora parece el aire de cada día

Hoy día es martes y aquí en Brasil están para ocurrir la próxima semana por lo menos 35 nuevas manifestaciones, en todo el país, desde que el país entró en una especie de fiebre por la democracia directa  - o por lo menos por gente que quiere mudar las cosas. O que dice que quiere. Han ocurrido actos de violencia, pero esporádicos. No son más eso que Uds. han visto los últimos días.
Mientras tanto, la presidenta Dilma (ella quiere ser llamada siempre de presidentA) habló en cadena nacional el viernes - después de reunirse con el ministério y haber hablado con Lula - y, pasado un final de semana, se reunió con los representantes del Movimento do Passe Livre (Movimiento del Pasaje Libre) y propuso una llamada "reforma política". Propuso al final de ayer porque hoy día ella dice que no dijo lo que dijo. Y todos discuten: ella dijo o no?
Las discusiones sobre reforma política son tradicionales aquí en Brasil. Por varios motivos. El sistema representativo heredado de los años 30 y de la dictadura de 64 hace con que los votos de los habitantes de los estados (províncias) de sudeste y sur "valgan menos" que los de estados del norte, nordeste y centro-oeste en la cámara de diputados. Por qué? Porque los votos necesarios para elegir un político a ocupar la cámara en los estados del norte y nordeste son menos que los del sudeste y sur. Eso como una especie de acción afirmativa antes de ésta haber existido. Pero hay muchos otros problemas. Problemas que hacen con que los políticos no tengan representatividad y que Brasilia funcione como que en interés propio, legislando en temas que la sociedad simplemente acepta - o aceptaba (la cámara ya se siente también presionada por las manifestaciones).
No iré hablar mucho más porque no soy especialista en el asunto de reforma política. Pero les digo que, por haber estudiado ciencia política en el post-grado, reforma política, voto distrital misto, representatividad, etc., son antiguas banderas que aparecen repentinamente y que desaparecen también sin que notemos.
Pero Dilma ha hido más lejos. Dijo "plebiscito" y álguiém más "constituinte" (de constitución). Los representantes del Supremo (Tribunal Federal) se irritaron, abogados todavía más y ahora Dilma está en esa situación inédita: dijo reforma política y plebiscito para agradar, aparentemente, y además de no haber agradado - a muchos, claro, le ha gustado la idea, pero no vemos eso en las manifestaciones -, ahora tiene que desdecirse.
A Uds. que viven lejos, en otros países, eso puede desinteresarles. Claro, la revolución parece que no existe más. Las protestas contra corrupción parece que no han cambiado nada. Los estudiantes ganaron la batalla del pasaje libre (o al menos del no aumento de los pasajes - hay otros, muchos, que quiere el pasaje cero), han sido llamados por la presidentA, los movimientos continúan localizados, y todo parece ser com siempre fue.
Pero les digo que no. Acabo de leer que los sindicatos van a protestar el día 11 - ellos que se callaron todo ese tiempo. El hotel de la selección nacional de fútbol ahora tiene la seguridad reforzada. La cámara promete discutir luego la PEC 37 y los royalties del pré-sal para la educación. A todo minuto aparece una novedad. Hoy día los manifestantes - pocos, comparativamente - pararon la avenida aquí a mi lado - estoy casi en el suburbio. No ha pasado nada, todo ha sido pacífico. Las banderas, como siempre, generalistas, tipo "abajo la corrupción", "por el no aumento de los alquileres", etc. Cada uno se manifiesta como puede. En general, son personas mal organizadas que salen a la calle a gritar o a caminar parando el tráfego. Bueno.
Pero todo ha cambiado radicalmente en este país y en todo el país. Voy a una lanchonete (bar, también llamado de boteco): personas comunes discuten política y temas difíciles. Almuerzo y el gallo en frente convence los otros que los pasajes son un robo - por la contabilidad de las empresas de bus, etc. Termino de almorzar y mis amigos quieren hablar de política. Vuelvo a trabajar - y a todo momento aparece un nuevo tema político. Termino de trabajar y mi compañera de trabajo está desolada por causa de la llamada "bolsa prostituta" (una compensación de la sociedad a las que deciden prostituirse). La política es el aire que respiramos y eso parece que no termina más. Ahora - digo ahora - el presidente de la cámara de diputados anuncia un paquete de medidas para responder a las manifestaciones.
Pero tengo que terminar comentando algo más - que puede haber pasado despercebido.
Desde el viernes he comprado todos los periódicos y revistas que puedo. He leído casi todo lo que me ocurre leer sobre lo que pasa. Pero siento en mí una especie de descreyencia - no sé si el término es ese, me refiero a no creer más. Por qué? Porque parece que ahora todos los que estaban en una posición privilegiada - los formadores de opinión - y que han sido sorprendidos por las manifestaciones no tienen más nada de útil a ofrecer. No siento que los movimientos tienen más profesores, especialistas, etc. que puedan guiarlos. Parece que todos ahora quieren pensar por sí mismos. Y eso es lindo.
Bueno, páro porque ahora mismo está siendo votada la PEC37, la llamada Ley de la Impunidad, y otras medidas. Luego les diré lo que ha sucedido, para después continuar con más novedades en esta revolución silenciosa por que pasa el otrora país del fútbol.

Especial para o MBC Times en Espanhol

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